“La vida es un soplo”, tributo al arquitecto brasileño Oscar Niemeyer

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Oscar Niemeyer, el padre de la arquitectura brasileña, una leyenda de la arquitectura moderna, y con total probabilidad el único arquitecto de la historia que podía presumir de haber diseñado una ciudad desde cero. Su extensa obra se puede definir como futurista y está toda plagada de hormigón y de líneas ondulantes inspiradas, según él mismo decía, en el cuerpo de la mujer preferida y en las delicadas ondas que forman los ríos y las nubes del paisaje brasileño.

Catedral de Brasilia de noche

Os invitamos a ver y a comentar este documental del también brasileño Fabiano Maciel en el que  podemos repasar la trayectoria de la vida y obra de Óscar Niemeyer desde sus primeros pasos hasta su colaboración junto a maestros de la talla de Le Corbusier y su compatriota Lúcio Costa.

La vida es un soplo, película de Fabiano Meciel

 

Niemeyer ha sido un creador incansable, hasta los 104 años ha seguido al pie del cañón. Una persona activa, infatigable que dejó de ir a su despacho sólo  unos días antes de su muerte y que nos dejó más de 600 obras repartidas por todo el mundo.

El impecable orden urbanístico de Brasilia (declarada  Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987) y su gran valor arquitectónico le concedieron fama a nivel mundial destacando obras como la sede de la Secretaría General de Naciones Unidas, en Nueva York; el Centro Cultural Le Havre construido en 1982 en Le Havre, Francia; la Serpentine Gallery situada en el Hyde Park de Londres o La Universidad Constantine situada en la ciudad de su propio nombre, en Argelia e inspirada en la Universidad de Brasilia.

Serpentine Gallery, Hyde Park, Londres

Como decíamos, Niemayer fue un trabajador inagotable hasta sus últimos días, en sus propias palabras: “Lo que vale es la vida entera, cada minuto. Y creo que pasé bien por ella. Cuando miro hacia atrás, veo que no hice concesiones y que seguí el buen camino. Eso es lo que da una cierta tranquilidad”.

Centro Niemeyer, Avilés, España